Experimentación en educación infantil: experiencias con el color.

El niño/a comprende el mundo en la medida en que interactúa con él; lo manipula, lo transforma. La observación y experimentación proporcionan al niño/a elementos de reflexión, y le obligan a crear sistemas más organizados de interpretación de lo que le rodea. El interés y justificación de una pequeña investigación reside en que los niños y niñas tienen miles de interrogantes sobre lo que les acontece a ellos mismos y a las cosas que están a su alrededor. Estos interrogantes pueden dar lugar a que los pequeños formulen hipótesis o conjeturas cuya exposición en el grupo generará controversias, interacciones, que facilitarán el crecimiento intelectual y afectivo de todos. Poner a los niños/as en actitud de indagar sobre lo que suscita su curiosidad puede ser el conocimiento de despertar una actitud científica y un espíritu crítico ante la vida.

Desde la escuela los docentes hemos de ser conscientes de que el conocimiento científico es parte de la cultura general, y que para los niños puedan entender mejor el mundo que los rodea hemos de  mejorar sus conocimientos científicos. Para ello podremos realizar gran variedad de experimentos que desde el ámbito de la ciencia entren en el aula y dinamicen las actividades cotidianas convirtiéndose en estrategias metodológicas muy motivadoras para nuestro alumnado.

● EXPERIENCIAS CON EL COLOR:

– Los colores del Arco Iris:    Proponemos a los niños/as hacer un disco de cartón o bien un CD que no sirva ya. Se divide el disco en 7 partes. En cada una pintamos uno de los 7 colores del espectro rojo, naranja, amarillo, violeta, verde añil y azul. Cuando ya esté pintado le introducimos en el orificio un lápiz de ese grosor y lo hacemos girar sobre la punta. ¿Cómo funciona? Cuando el círculo gira muy rápido, nuestros ojos ven los colores, pero llegan mezclados a nuestros cerebros. Nuestros cerebros nos dicen que la diana tiene un color blanco grisáceo.

Resulta interesante conversar con los niños sobre lo que sucede, cómo vemos el disco, por qué creen que ocurrirá esto, etc. Naturalmente nuestra intención no es que descubran las leyes físicas que explican estos fenómenos sino que se planteen con curiosidad e interés preguntas sobre ellos.

– Para ver la vida de colores:  Nos hacemos unas gafas de cartulina poniendo los cristales de papel de celofán de colores. ¿Qué ocurre si superponemos unas gafas con otras? Proponemos a los niños/as que en el cuaderno peguen trocitos de papel de celofán de colores, así como que hagan superposiciones de los mismos para obtener muchos más colores. Les pedimos que escriban los nombres de los colores obtenidos.

– Fabricamos colores: Utilizando los colores primarios, realizamos la mezcla de ellos obteniendo nuevos colores. Durante el proceso debemos ir planteando preguntas (¿qué color saldrá si mezclamos estos dos?), planteando hipótesis (yo creo que si mezclamos el rojo y el azul saldrá el lila!), y,  por supuesto, comprobando los resultados.